Aumento del gasto público y recursos insuficientes
Por Fernando Gabriel Ovando[1]
En los últimos meses, es tema de debate el aumento del gasto público y los inconvenientes que tiene el fisco para mejorar los niveles de recaudación y hacer frente a sus compromisos. A pesar que los ingresos recaudados vienen en aumento, también lo hacen los gastos y de esta manera, el margen de maniobra para redistribuir esos ingresos a favor de sectores menos favorecidos se ve limitado. Aquí se exponen algunas cifras e indicadores que plantean esa cuestión y nos invitan a reflexionar sobre un aspecto tan crucial como es el rol del Estado.
Así se observa que durante el año 2010 el gasto público total se incrementó en 9,1%, mientras que el gasto rígido que representa casi el 80% de los mismos, ha aumentado 11,9% en comparación con el año 2009. Este tipo de gasto se refiere a los gastos propios de funcionamiento del aparato estatal, y principalmente al pago de sueldos y salarios, los cuales tienen una participación del 60% dentro de los gastos corrientes o rígidos. Se les atribuye esta denominación debido a que necesariamente deben ser ejecutados al margen que se obtengan o no los ingresos esperados.
Cuadro 1 - Gasto Total y Rígido de la Administración Central (Variación interanual y participación)
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Ministerio de Hacienda.
En cuanto a los ingresos que percibe el Estado, en el año 2010 se obtuvo un aumento de 15,8% en comparación al 2009. De esos ingresos, el 70% proviene de los ingresos tributarios, los cuales presentaron un incremento de 23,5% en el último año, perteneciendo la mitad de estos ingresos tributarios al IVA. El 30% restante corresponde a los ingresos no tributarios, entre los que se encuentran las compensaciones y regalías de las represas de Itaipú y Yacyretá ( 50% de los ingresos no tributarios). Es importante resaltar que prácticamente el 80% de las recaudaciones corresponde a impuestos indirectos[2], los cuales son considerados socialmente injustos debido a que la tasa a pagar no distingue la capacidad contributiva de las personas[3] .
Cuadro 2 - Ingreso total e ingresos tributarios de la Administración Central (Variación interanual y participación)
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Ministerio de Hacienda.
Se puede observar que durante el año 2010 los ingresos tributarios como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) fueron mayores en comparación a los últimos años alcanzando el 13,4% del PIB (Gráfico 1). También se observa que el gasto rígido con respecto al PIB pasó del 15% en el 2009 al 14% en el 2010. Sin embargo, al comparar estos indicadores en el periodo observado (2004-2010), aún se observa una situación deficitaria.
El hecho de tener una elevada proporción de gasto rígido reduce las posibilidades de reasignación del gasto a otras áreas y, en la medida en que los gastos rígidos sean superiores a los ingresos tributarios, se genera un déficit que debe ser financiado a través de otros mecanismos para hacer frente a los demás compromisos del Estado; tales como los royalties y compensaciones de las hidroeléctricas, la emisión de bonos o el endeudamiento externo.
Gráfico 1 - Ingresos tributarios y gasto rígido
(En porcentaje del PIB)
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Ministerio de Hacienda y el BCP.
Teniendo la necesidad de contar con mayores recursos no se ha conseguido aún reducir la inequidad tributaria[4] ni encontrado la manera de combatir más a fondo la evasión impositiva[5]. Hasta el momento los intentos se ven frustrados y dominados por intereses políticos y económicos de los cuales aún el Paraguay no se puede desprender. Un ejemplo de esto son las constantes trabas en el Congreso para la vigencia del Impuesto a la Renta de las Personas fiscas (IRP)[6].
Además, no se debe soslayar el hecho que los incrementos de los gastos rígidos tienen lugar en el Congreso, sin tener en consideración la capacidad recaudadora del fisco. Este hecho, como se menciono anteriormente, obliga a recurrir a otras fuentes de financiamiento.
Ante esta situación, la administración gubernamental debe mejorar los mecanismos de control en la recaudación de los impuestos aplicados actualmente y buscar la manera de conciliar las diferencias políticas y económicas que postergan la aplicación del IRP, que aparte de la recaudación adicional que puede proveer es fundamental para contribuir a la transparencia y formalización de la economía. Otra materia pendiente es mejorar la gestión en las instituciones públicas de manera tal que la sociedad verifique su contribución traducida en mejores servicios públicos, estableciendo así una mayor disposición a colaborar de parte de todos.
[1] Economista del Centro de Análisis y Difusión de la Economía Paraguaya (CADEP).
[2] Son indirectos porque gravan el consumo final. Ejemplo: El Impuesto al Valor Agregado (IVA), con una tasa general del 10% en Paraguay.
[3] En el caso de los impuestos directos, estos son pagados por los contribuyentes de acuerdo al nivel de ingresos y riqueza.
[4] Existe inequidad tributaria porque los impuestos indirectos son en proporción mucho mayor a los impuestos directos dentro de la estructura fiscal.
[5] Según técnicos del BCP la evasión impositiva sería de 3,5% en porcentaje del PIB (Año 2010) (http://www.abc.com.py/nota/evasion-impositiva-del-pais-rondaria-el-3-5-del-producto-interno-bruto/)
[6] En Julio de 2010 fue postergada la vigencia del IRP en el Congreso por cuarta vez, en esta ocasión hasta el 2013 (http://www.abc.com.py/nota/irp-congreso-suspende-aplicacion-de-irp/).
Por Fernando Gabriel Ovando[1]
En los últimos meses, es tema de debate el aumento del gasto público y los inconvenientes que tiene el fisco para mejorar los niveles de recaudación y hacer frente a sus compromisos. A pesar que los ingresos recaudados vienen en aumento, también lo hacen los gastos y de esta manera, el margen de maniobra para redistribuir esos ingresos a favor de sectores menos favorecidos se ve limitado. Aquí se exponen algunas cifras e indicadores que plantean esa cuestión y nos invitan a reflexionar sobre un aspecto tan crucial como es el rol del Estado.
Así se observa que durante el año 2010 el gasto público total se incrementó en 9,1%, mientras que el gasto rígido que representa casi el 80% de los mismos, ha aumentado 11,9% en comparación con el año 2009. Este tipo de gasto se refiere a los gastos propios de funcionamiento del aparato estatal, y principalmente al pago de sueldos y salarios, los cuales tienen una participación del 60% dentro de los gastos corrientes o rígidos. Se les atribuye esta denominación debido a que necesariamente deben ser ejecutados al margen que se obtengan o no los ingresos esperados.
Cuadro 1 - Gasto Total y Rígido de la Administración Central (Variación interanual y participación)
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Ministerio de Hacienda.
En cuanto a los ingresos que percibe el Estado, en el año 2010 se obtuvo un aumento de 15,8% en comparación al 2009. De esos ingresos, el 70% proviene de los ingresos tributarios, los cuales presentaron un incremento de 23,5% en el último año, perteneciendo la mitad de estos ingresos tributarios al IVA. El 30% restante corresponde a los ingresos no tributarios, entre los que se encuentran las compensaciones y regalías de las represas de Itaipú y Yacyretá ( 50% de los ingresos no tributarios). Es importante resaltar que prácticamente el 80% de las recaudaciones corresponde a impuestos indirectos[2], los cuales son considerados socialmente injustos debido a que la tasa a pagar no distingue la capacidad contributiva de las personas[3] .
Cuadro 2 - Ingreso total e ingresos tributarios de la Administración Central (Variación interanual y participación)
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Ministerio de Hacienda.
Se puede observar que durante el año 2010 los ingresos tributarios como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) fueron mayores en comparación a los últimos años alcanzando el 13,4% del PIB (Gráfico 1). También se observa que el gasto rígido con respecto al PIB pasó del 15% en el 2009 al 14% en el 2010. Sin embargo, al comparar estos indicadores en el periodo observado (2004-2010), aún se observa una situación deficitaria.
El hecho de tener una elevada proporción de gasto rígido reduce las posibilidades de reasignación del gasto a otras áreas y, en la medida en que los gastos rígidos sean superiores a los ingresos tributarios, se genera un déficit que debe ser financiado a través de otros mecanismos para hacer frente a los demás compromisos del Estado; tales como los royalties y compensaciones de las hidroeléctricas, la emisión de bonos o el endeudamiento externo.
Gráfico 1 - Ingresos tributarios y gasto rígido
(En porcentaje del PIB)
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Ministerio de Hacienda y el BCP.
Teniendo la necesidad de contar con mayores recursos no se ha conseguido aún reducir la inequidad tributaria[4] ni encontrado la manera de combatir más a fondo la evasión impositiva[5]. Hasta el momento los intentos se ven frustrados y dominados por intereses políticos y económicos de los cuales aún el Paraguay no se puede desprender. Un ejemplo de esto son las constantes trabas en el Congreso para la vigencia del Impuesto a la Renta de las Personas fiscas (IRP)[6].
Además, no se debe soslayar el hecho que los incrementos de los gastos rígidos tienen lugar en el Congreso, sin tener en consideración la capacidad recaudadora del fisco. Este hecho, como se menciono anteriormente, obliga a recurrir a otras fuentes de financiamiento.
Ante esta situación, la administración gubernamental debe mejorar los mecanismos de control en la recaudación de los impuestos aplicados actualmente y buscar la manera de conciliar las diferencias políticas y económicas que postergan la aplicación del IRP, que aparte de la recaudación adicional que puede proveer es fundamental para contribuir a la transparencia y formalización de la economía. Otra materia pendiente es mejorar la gestión en las instituciones públicas de manera tal que la sociedad verifique su contribución traducida en mejores servicios públicos, estableciendo así una mayor disposición a colaborar de parte de todos.
[1] Economista del Centro de Análisis y Difusión de la Economía Paraguaya (CADEP).
[2] Son indirectos porque gravan el consumo final. Ejemplo: El Impuesto al Valor Agregado (IVA), con una tasa general del 10% en Paraguay.
[3] En el caso de los impuestos directos, estos son pagados por los contribuyentes de acuerdo al nivel de ingresos y riqueza.
[4] Existe inequidad tributaria porque los impuestos indirectos son en proporción mucho mayor a los impuestos directos dentro de la estructura fiscal.
[5] Según técnicos del BCP la evasión impositiva sería de 3,5% en porcentaje del PIB (Año 2010) (http://www.abc.com.py/nota/evasion-impositiva-del-pais-rondaria-el-3-5-del-producto-interno-bruto/)
[6] En Julio de 2010 fue postergada la vigencia del IRP en el Congreso por cuarta vez, en esta ocasión hasta el 2013 (http://www.abc.com.py/nota/irp-congreso-suspende-aplicacion-de-irp/).